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martes, 22 de julio de 2014

Cuidados específicos para nuestro pelo en verano

Las vacaciones son sinónimo de playa, piscina, sol, agua, arena... Demasiados factores que inciden sobre nuestra piel, pero también sobre nuestro cabello. El pelo puede ser el gran olvidado en esta época del año. Podemos llegar a pensar que con los cuidados diarios que aplicamos a nuestro pelo es suficiente. Sin embargo, la arena, la sal, el cloro, etc, son componentes muy agresivos para nuestro cuero cabelludo, haciendo que éste pierda su estado natural, su brillo y su luminosidad. 

La luz solar que incide sobre nuestro pelo hace que, tanto el color como la textura de nuestro cabello, se vean alterados, tanto si se trata de cabellos teñidos como si es su color natural. La radiación UV provoca un blanqueamiento en el cuero cabelludo dejándolo sin brillo. La queratina, principal componente del pelo, también se ve afectada haciendo que nuestro pelo se vuelva más frágil y quebradizo, notando el pelo áspero al tacto. 

www.nosotros2.com

Por suerte, sabiendo todas estas consecuencias negativas que estos factores tienen sobre nuestro pelo, podemos ponerle remedio antes de que el daño se manifieste. Basta con cambiar nuestra rutina de cuidado en el cabello y utilizar los productos específicos que nuestro pelo necesita para pasar el verano de manera sobresaliente.

Estos son algunos consejos para mantener nuestro pelo en hidratado y en óptimas condiciones este verano:

1. Lavado del cabello: debemos utilizar un champú que nos aporte un extra de hidratación para compensar la pérdida de agua provocada por el sol. Tras el lavado, es esencial utilizar un acondicionador que incremente esa hidratación. Debemos fijarnos que nuestros champú y acondicionador lleven entre sus ingredientes keratina o pantenol, ya que ambos son dos ingredientes que aportan un plus de hidratación a nuestro cabello.
2. Refuerzo de hidratación: existen en el mercado elixires con aceites, como el Aceite de Argan, que son muy útiles para devolver la hidratación al cuero cabelludo deshidratado. Este tipo de productos se pueden aplicar tanto sobre el cabello seco como mojado.
3. Efecto reparador y refrescante: al final del día, tras la exposición solar, podemos aportar a nuestro cabello un tratamiento extra de hidratación y reparación a través de las mascarillas capilares. Debemos comprobar que son adecuadas para devolver a nuestro cabello el brillo y la fuerza perdidos durante la larga jornada de baño.
4. No olvidar los pequeños detalles: las altas temperaturas son más agresivas con las partes más débiles de nuestro cabello, es decir, con las puntas del pelo. Los reparadores de puntas previenen las puntas secas y abiertas. 

Además de utilizar los productos adecuados en el tratamiento de nuestro pelo, también es aconsejable adquirir unos hábitos muy sanos y fáciles de seguir, para ayudar en el cuidado de nuestro pelo. Beber suficiente agua no sólo nos evita sufrir deshidrataciones y golpes de calor como consecuencia de las altas temperaturas, sino que además nos contribuye a mantener nuestra piel y nuestro pelo perfectamente hidratados. También es conveniente proteger a nuestro pelo de un exceso de radiación solar y altas temperaturas utilizando sombreros y pañuelos. Por último, los sprays que solemos llevar a la playa para refrescarnos de vez en cuando nuestro cuerpo, también son buenos aliados y contribuyen a hidratar y refrescar nuestro pelo día a día durante nuestras vacaciones.

Si queréis los mejores productos para el cuidado de vuestro cabello estas vacaciones, los podéis encontrar en nuestra web, como por ejemplo URESIM Aceite de Argan 100%, un aceite ligero y de gran capacidad de absorción obtenido de la presión en frío de las semillas de Argania spinosa, desodorizado y sin perfume. Contiene una gran cantidad de ácidos grasos poliinsaturados que le confieren propiedades hidratantes, nutritivas y regeneradoras. 



martes, 8 de julio de 2014

Cómo se debe aplicar el fotoprotector

Una de las actividades que más vamos a hacer durante el verano y las vacaciones va a ser tomar el sol. Es de sobra conocido los beneficios que las radiaciones solares tienen para nuestro organismo:

  • Estimula la síntesis de Vitamina D, lo que nos ayuda a prevenir la osteoporosis y el raquitismo.
  • Favorece la circulación sanguínea.
  • Actúa en el tratamiento de algunas dermatosis, como por ejemplo la psoriasis.
  • Aumenta la sensación de confort y el estado anímico.
saludpasion.com

Sin embargo, no debemos olvidar que siempre debemos exponernos al sol con protección, sino queremos que estas radiaciones nos perjudiquen seriamente. Las radiaciones solares que llegan hasta la superficie terrestre son:
  • UV-B: las radiaciones más energéticas y responsables de las quemaduras solares, es decir, de la aparición de eritema en la piel. Su efecto sobre la piel se nota a las 24 horas de la exposición y dura unos 3-4 días. También son los responsables del bronceado en la piel.
  • UV-A: estas radiaciones penetran en profundidad, siendo las responsables del fotoenvejecimiento en la piel. Junto con los UVB, a largo plazo, pueden provocar la aparición de melanoma (cáncer de piel). También juegan un papel esencial en el desencadenamiento de las alergias solares.
  • UV-C: son los menos energéticos y pueden penetrar más en la piel. Su efecto es menor ya que quedan retenidos en la capa de ozono.
  • Infrarrojos: responsables de la aparición de eritema (quemadura solar) en la piel.
  • Luz visible.
No todas las pieles van a reaccionar de la misma manera frente a las radiaciones solares. Esto varía en función del fototipo. El fototipo define los caracteres propios de un grupo de individuos que permite establecer su sensibilidad al sol. La pigmentación de la piel, los ojos, el cabello, la cantidad de pecas y la capacidad de la piel para adquirir un bronceado definen los diferentes fototipos. Para saber más sobre los fototipos, os recomendamos que leáis nuestra entrada del mes de Mayo "El Factor de Protección Solar según cada tipo de piel". Las personas pelirrojas y rubias tienen una menor tolerancia al sol, viéndose incrementada en las personas castañas y, sobre todo, en las personas morenas.

www.huesosaludable.com

A la hora de exponernos al sol es fundamental saber qué nivel de radiación hay en cada momento del día. Si el índice UV es muy alto, se desaconseja tomar el sol en esos momentos. Podéis consultar el pronóstico de la radiación UV en España cada día en este enlace

Como ya hemos dicho anteriormente, para evitar los efectos nocivos de la radiación solar y poder disfrutar de un bronceado saludable, debemos aplicarnos siempre un fotoprotector. El fotoprotector es un producto cosmético que contiene filtros capaces de protegernos de los efectos perjudiciales del sol. 

¿Qué requisitos deben cumplir los fotoprotectores? No deben ser productos sensibilizantes (causantes de alergias) y deben ser estables a la luz, aire, humedad y calor. Resistentes a la arena, la sudoración y el agua, especialmente importante en el caso de los niños. Sus filtros deben cubrir el más amplio espectro de radiación solar. 

¿Cómo se elige el fotoprotector más adecuado? A la hora de comprar un fotoprotector, se deben tener en cuenta los siguientes aspectos:
  • Factores ambientales: hora del día, estación del año, situaciones personales.
  • Factores individuales: edad, tipo de piel, fototipo.
  • Otros factores: embarazo, tratamiento con medicamentos, problemas en la piel.
¿Cómo debemos aplicarnos el fotoprotector? Cuando se trata de la primera exposición solar del día, debemos aplicarnos el fotoprotector media hora antes de la exposición, sino cumplimos esta premisa la efectividad del fotoprotector disminuye. 
La piel debe estar correctamente hidratada y limpia (sin maquillaje). Se deben evitar el uso de productos que contengan alcohol y perfumes (colonias, desodorantes), que puedan dar lugar a manchas oscuras en la piel. 
El fotoprotector debe aplicarse abundantemente y de forma homogénea en las zonas expuestas y, especialmente, en las zonas más sensibles: orejas, nariz, labio, cuello, hombros, parte superior de la espalda, nuca, parte trasera de las rodillas, pantorrilas y pies. Después, hay que repetir la aplicación cada dos horas, después de un baño o en caso de eliminación (frotamientos, secados, etc.). 

Hay que evitar tomar el sol, o bien reforzar la fotoprotección, a las horas centrales del día (entre las 12 y las 16h) ya que a estas horas las radiaciones son más fuertes. Como medidas complementarias de protección, es recomendable utilizar gafas de sol adecuadas (compradas siempre en ópticas), barras de labio con fotoprotección, y sombreros para proteger la cabeza. Estas medidas son especialmente importantes en la población más sensibles (bebés, niños, ancianos y mujeres embarazadas). Es importante ingerir abundante líquido, especialmente agua, para compensar la pérdida por la exposición solar. El fotoprotector se debe utilizar incluso los días nublados ya que, aunque las nubes retienen parte de la radiación, no la bloquean por completo.

www.dfarmacia.com


Tras la exposición solar, es aconsejable hidratar bien la piel después de una ducha con agua tibia, a fin de recuperar la pérdida de agua y prolongar el bronceado. Debemos extremar el cuidado de la piel de la cara, las manos y el contorno de los ojos para evitar así el efecto del fotoenvejecimiento. 

Estos pequeños consejos son muy fáciles de llevar a cabo y de un enorme beneficio para nuestra salud. Nuestra piel tiene memoria y las quemaduras de hoy son las lesiones (algunas muy graves) del mañana. Así que ya sabés, "no hagáis el gamba este verano".




martes, 1 de julio de 2014

Un rayo de sol...

Ya lo decía la canción: “Un rayo de sol… Me trajo tu amor…” (no esperéis que me ponga a cantar porque lo hago fatal). Sólo quería utilizar esta pegadiza canción para deciros, si no lo sabéis ya, que ya estamos en verano. Se inicia oficialmente la época de las vacaciones, los viajes, la playa, el sol, el chiringuito… Todo lo bueno del verano ya está aquí. Y nosotros queríamos darle la bienvenida.

Estrenamos el mes de Julio deseando que suban las temperaturas para poder ir desempolvando el traje de baño y prepararnos para disfrutar de unas largas jornadas de chapuzones varios. Eso sí, siempre con cabeza y responsabilidad.

Durante el mes de Julio os iremos contando, tanto aquí en el Blog como en nuestra página de Facebook, pequeños consejitos para disfrutar de unas más que merecidas vacaciones, pero sin sobresaltos. Os enseñaremos cómo debéis aplicaros el fotoprotector antes de exponernos al sol, con el fin de evitar eritemas y quemaduras solares que, a la larga, nos puedan suponer un problema mucho más serio. También hablaremos de cómo cuidar nuestro cabello en esta época del año. Las radiaciones solares, el cloro de las piscinas, la sal de la playa, entre otros factores, pueden hacer que nuestro pelo se debilite y pierda fuerza y luminosidad. Como no queremos que eso os pase, debéis estar muy atentos a nuestros consejos.

Además de todos estos contenidos, seguro que os tenemos alguna que otra sorpresa reservada. Debéis estar vigilantes a todos nuestros movimientos.


Sin más, ¡¡demos la bienvenida al mes de Julio, demos la bienvenida a las vacaciones!!